Aunque la habitación en si predominan los toques pastel, colores como el mint, el rosa y unas paredes en un tono piedra que me parece de lo más acogedor. Además han sabido integrar a la perfección algunas de las tendencias actuales y dulcificarlas en un conjunto diferente, encantador que hace de este dormitorio de bebé uno de mis favoritos.
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Además como podéis ver mezclan mobiliario de diferentes colores, creo que es una idea genial si ya tienes un cómoda y te falta la cuna, así como la guirnalda a base de retales de tela que os podéis hacer fácilmente, me declaro fan absoluta del dormitorio de la pequeña Kenley.
¿Os gusta el dorado y los toques pastel?
¿Qué os parece esta combinación para un bebé?